La Diosa de Ébano

“Hay que guerriarla….” fue una de las frases que me dijo Lina cuando nos pegábamos esas fiestas de toda la noche en Red Room Club. Se me quedó  porque siempre vi una negra mimada, tal vez hija de mami o consentida de papi… quien sabe. Pero justo cuando me dijo eso, la perspectiva empezó a cambiar. Conozco a Lina hace mucho, valoro el hecho de que en una ciudad tan hostil con las mujeres como Pereira,  Lina se mantenga intacta socialmente. Adquirir cualquier fama en Pereira, para una mujer joven, que vive sola, que esta buena y ademas es negra, es una bomba de tiempo. Pero Lina nunca cedió….

Es inevitable no pensar en María-Teresa Tess Asplund, cuando veo a Lina, esa mujer desafiante del estándar, guerrera, luchadora. Pero no como esas que publican las fotos de sus hijos que en realidad les cría y cuida la mama, tampoco como esas que están dando lidia en un gimnasio todo el día por redes sociales. Me refiero a las luchadoras con carácter y criterio, a las que luchan por terminar su carrera universitaria, a las que guerrean un promedio alto, a las que pelean una buena nota. De esas es que necesitamos más.

Así que había que dejar toda esa fuerza en unas fotos, había que detener ese momento en el tiempo y este era el momento….

Tengo una manía rara, y es que clasifico a cada persona que conozco en mi vida con una canción, y Lina definitivamente suena a “Lost Ones” de Lauryn Hill, otra guerrera más musical, pero que peleó con fiereza una lucha en una industria machista como es el hip-hop. La guerrera que fotografiamos solo refleja lo que Lina quiere ocultar, lo oculta detrás de la estética Pereirana; es complicado que después de estas fotos no vean a la verdadera Lina, la que siempre había querido ocultar…. la que le va a traer muchas miradas, pero también mucha envidia.

“Oe venga” será tal vez su grito de guerra, podríamos haberlo cambiado por algo como “Que hubo hpta” pero Lina tiene buena crianza, y una dama por más fiera que sea no se permite decir esas palabrotas. Estamos en la Virginia y los obreros la miran mientras esta desnuda, curiosamente no le sostienen la mirada, ella tiene furia puede ser muy dulce o puede ser cruel, es una versión negra de Daenerys Targaryen. No necesita que nadie la defienda, creo que sabe de sobra como hacerlo sola. Intimida…. cuando le hago los retratos me da miedo, creo que va a atacarme si hago algo indebido, y eso que la conozco hace años. Definitivamente es una guerrera.

La Diosa de Ébano no bendice a nadie, pero tiene claro que la lucha es personal, tal vez por que Lina es de esas guerreras que ganan primero y luego van a la guerra, mientras que las otras (las guerreras derrotadas) van primero a la guerra y luego buscan la victoria.

@andresfranco